Hay heridas en el parto que no se ven, pero que quedan marcadas en lo más profundo, acompañando a las mujeres incluso por muchos años. Las burlas, los regaños, la prohibición de estar acompañada, el miedo a expresarse… Diana narra la violencia psicológica que recibió en todo su desarrollo del parto y en su parto. Asimismo, Marcela, psicóloga y educadora prenatal, invita a las madres a que sanen esas heridas.
Únete a nuestro boletín y no te pierdas ni una sola noticia