Siloé: El tour que promete nuevos comienzos

Siloé: El tour que promete nuevos comienzos

Por: Valeria Castaño, María Alejandra Benavidez y María de los Ángeles Restrepo

En la parte montañosa de Cali, exactamente al suroeste, se visualiza una estrella que desde 1973 prende su luz todas las noches. Este símbolo representa a la comuna 20, donde hoy grupos juveniles apuestan por realizar turismo social.

El recorrido proyecta la memoria colectiva de los habitantes del populoso sector conocido como Siloé, mediante la promoción de lugares históricos de la zona. Las denominadas “Ruinas de conflicto”, el “Ventiadero” y por supuesto, “la estrella de David”.

De acuerdo con el historiador, Claudio Borrero, los primeros asentamientos llegaron a la zona en 1940. Al parecer, se trataba de una serie de terrenos que fueron invadidos por familias desplazadas por una virulenta violencia desencadenada por la guerra partidista entre conservadores y liberales.

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El “pesebre embalconado” empezó a formarse con pequeñas fincas que desde su ubicación se visualizaba el panorama de la creciente Cali. Según otras versiones, esta zona fue poblada por familias mineras, pertenecientes al Viejo Caldas, quienes iban en busca del carbón abundante que se encontraba en la zona de ese entonces.

Ruta del recorrido a Siloé


Para emprender el viaje a Siloé hay que dirigirse a la estación del MÍO de Unidad Deportiva, la cual conecta con la Terminal de Cañaveralejo. Durante el trayecto en el Miocable, predomina la vista de numerosas casas sobre la urbe y la gran zona montañosa de la comuna 20, compuesta por 14 barrios y con alrededor de 100.000 habitantes.

La primera parada es en Tierra Blanca, donde sus instalaciones se prestan como un museo cultural, en el que se expone la historia de la vida musical de Cali; la salsa como carta de presentación ante el mundo y claramente, el emblemático fragmento escrito en las paredes: ‘Que todo el mundo te cante’ ,del Grupo Niche.

Tras una breve parada en las estaciones Lleras Camargo y Brisas de Mayo, partes del museo muestran los mitos y leyendas de la cultura popular como la ‘viuda alegre’, el ‘diablo de Juanchito’ y la ‘bruja hechicera’; además de la reina icónica de la ciudad, Jovita Feijoo.

Pero es realmente en Lleras Camargo, en donde hay que devolverse para empezar el recorrido de una caminata de 2,7 kilómetros por Siloé.

El primer punto se centra en las denominadas ‘Ruinas del conflicto’, un espacio que fue tomado por el M-19 y en estos momentos, la comunidad ha trabajado por resignificar ese entorno, por medio del arte urbano que crean los artistas locales. 

Después, el trayecto se dirige hacia el ‘Ventiadero’, un sendero ecológico con vista a la comuna 20, una de las áreas más emblemáticas de la ciudad.

¿Nuevo comienzo para Siloé?


Pese a las condiciones sociales y económicas a las que se enfrentan, la idea de los jóvenes por integrar a todos los sectores de la ciudad como fuente de ingreso para habitantes de la zona es a partir de la memoria colectiva, que busca alternativas para contribuir al proceso de recuperación urbana de la comuna.

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“La inmersión social de esto se basa en promover los tipos de actividades que se dan acá. Además, el generar empleo directo para los guías, quienes son parte de la comunidad y son los beneficiados del tour”.

Luís Rojas Olaya, miembro del colectivo ‘Tour de la Estrella’.

La última parada es en la estrella de Siloé, en el que se muestra la apropiación de la comunidad por su entorno. Ahora, jóvenes buscan resignificar el nombre del barrio, a través de estrategias que incentiven a recordar un pasado con tintes violentos, pero que hasta el momento promueven un cambio en el presente.

El arte, la cultura e identidad colectiva son iniciativas a las que les apuesta este recorrido de tour; sin olvidar de dónde vienen, pero con ideas que ayuden a cambiar el futuro para esta comunidad.


Las huellas del M-19 en Siloé

Muchos años después, quedarían plasmados recuerdos de la toma militar del 1 de diciembre de 1980, que tuvo como objetivo enfrentar a miembros del grupo guerrillero del M-19, en el que estuvieron involucrados la fuerza pública, militantes y habitantes de la comuna 20.

En la operación “Navidad limpia”, unos tres mil quinientos hombres de la fuerza pública, llegaron al barrio para derrotar al grupo armado. Por un lado, habitantes de la zona manifestaban que era necesario la intervención para cuidar el territorio, mientras otros alegaban que algunas de esas acciones atropellaban los derechos de los pobladores.

Actualmente, Siloé expone su historia a través de exposiciones que obligan a mirar al pasado. Según David Gómez, creador del Museo Popular de Siloé, narra cómo el M-19 ayudó a contrarrestar el problema de los niños del barrio que murieron por problemas gastrointestinales, tras la ubicación cercana de dos basureros a cielo abierto en el barrio, por lo que obligaron al  Gobierno a recoger estos residuos.


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