En las primeras horas de este jueves se conoció la resolución de la Dimayor que reducía la sanción a los dos equipos más representativos de Cali para poder jugar con sus hinchas en las tribunas oriental y occidental, manteniendo cerradas las populares norte y sur.
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Sobre el equipo escarlata, la Comisión Disciplinaria de la Dimayor, al igual que con el Deportivo Cali, resolvió lo siguiente:
- “Considera esta Comisión que la finalidad de la norma se alcanza manteniendo la sanción preventiva de la primera instancia pero modificándola para que la primera fecha sea en verdad totalmente a puerta cerrada que ya fue cumplida, y las restantes fechas en número de tres (3), la sanción solamente aplique en las específicas graderías donde se ubican los detectados colectivos de aficionados que originaron los hechos materia de esta decisión, lo que es decir las graderías laterales. Clausuradas estas partes específicas del estadio, con el efecto inmediato de excluir del espectáculo a las personas que las ocupan se alcanza el genuino sentido de la disposición y se cumple con el principio de la proporcionalidad”.
Sin embargo, en horas de la tarde de este jueves, la Alcaldía de Cali dio a conocer su postura sobre la resolución de la Dimayor, y pese a lo dicho por el ente rector del fútbol en Colombia, indicaron que “hasta que los equipos que usan el estadio olímpico Pascual Guerrero y la Dimayor no presenten un plan de seguridad integral que satisfaga a la Administración Municipal, el fútbol seguirá siendo un espectáculo a puerta cerrada para los hinchas en Cali”.
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“El escenario ‘sanfernandino’ no abrirá sus puertas para las hinchadas ni las barras organizadas, hasta tanto no se apruebe el plan de seguridad que deberán presentar los equipos y la Dimayor”, añadió el comunicado que argumenta que Maurice Armitage, como máxima autoridad del municipio y primer responsable de velar por la seguridad y el orden público de todos los caleños no habilitará ninguna de las tribunas del escenario deportivo hasta que no existan garantías reales se seguridad.
Fútbol a puerta cerrada
Lo anterior no significa que América de Cali deba buscar estadio, (con Deportivo Cali aplica diferente por tratarse de un escenario propio), según lo expresado por la Alcaldía de Cali, el decreto permite el uso del Pascual Guerrero para partidos de fútbol, pero sin habilitar las tribunas para el ingreso de público.
El permiso de uso y préstamo del estadio Pascual Guerrero, propiedad de la Universidad del Valle pero que es administrado por el Municipio, es facultad del Alcalde de Cali, Maurice Armitage.
Qué pide la Alcaldía
Según lo informó la administración municipal, los equipos que utilicen el estadio del barrio San Fernando están en la obligación de armar un plan integral de seguridad, el cual deberá ser aprobado por la Alcaldía de Cali para permitir nuevamente el ingreso de hinchada al escenario.
El plan debe contemplar medidas que apunten a la seguridad física del estadio y sus asistentes, medidas tecnológicas como el control biométrico y la detección de metales y la carnetización de las barras organizadas de tribunas populares, en este caso Barón Rojo Sur y Frente Radical Verdiblanco, si el Deportivo Cali aspira a jugar nuevamente en el Pascual Guerrero.
