Los exámenes anuales de salud son una herramienta vital para la prevención y detección temprana de enfermedades, y los chequeos sexuales no son la excepción. Asimismo, estos exámenes específicos permiten identificar y tratar a tiempo enfermedades de transmisión sexual (ETS).
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Adicionalmente, muchos casos no presentan síntomas visibles, pero pueden tener consecuencias graves si no se detectan y tratan oportunamente.
ETS más comunes detectadas en los chequeos anuales
Las infecciones pueden estar presentes por diferentes tipos de contactos, principalmente el sexual. Ahora bien, entre las enfermedades más comunes que se descubren a través de estos exámenes están la clamidia y la gonorrea, ambas tratables con antibióticos si se detectan a tiempo.
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Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en 2022 se reportaron más de 1.8 millones de casos de clamidia en Estados Unidos, lo que la convierte en la ETS más común en el país.
A su vez, aunque muchas personas pueden ser asintomáticas, si no se trata, la clamidia puede causar complicaciones graves, como infertilidad en mujeres.
Exámenes médicos: Vital para una vida cómoda
Otro ejemplo relevante es el Virus del Papiloma Humano (VPH), que es la ETS más extendida a nivel mundial. Justamente, el CDC estima que casi todos los hombres y mujeres sexualmente activos lo contraerán en algún momento de su vida. Aunque la mayoría de las infecciones por VPH son inofensivas y desaparecen por sí solas, algunas cepas pueden provocar cáncer cervical en mujeres.
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Ahora bien, la detección temprana a través de pruebas de Papanicolaou y exámenes de VPH es crucial para prevenir este tipo de cáncer.
Además, los exámenes de sangre para detectar el VIH son fundamentales, ya que una detección temprana permite el inicio rápido de tratamientos antirretrovirales, los cuales pueden reducir la carga viral a niveles indetectables. Mejorando significativamente la calidad de vida y reduciendo el riesgo de transmisión.
Asimismo, la importancia de estos chequeos radica en su capacidad para detectar enfermedades que, si se dejan sin tratar, pueden evolucionar hacia complicaciones más graves. La Organización Mundial de la Salud (OMS) subraya que la prevención y detección temprana son fundamentales para el control de las ETS y la protección de la salud sexual.
Ahora bien, los exámenes médicos deben también realizarse con otras enfermedades, con la idea de impulsar una detección temprana de infecciones.
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