Un partido de múltiples emociones, pero sin duda alguna, el Real Madrid ya se acostumbró a ganar este tan anhelado trofeo. La lesión de Mohamed Salah en el primer tiempo cambió rotundamente el rumbo del partido para los ‘reds’.
En los minutos iniciales el Liverpool tenía contras las cuerdas al Madrid, contrarrestaba cada jugada y presionaba constantemente a los contrarios. Sin embargo, eso no alcanzó para que ganaran el partido.
Los recursos individuales de los ‘merengues’ vuelven a tomar protagonismo en esta nueva final de la Champions League, Luca Módric y Gareth Bale fueron los jugadores claves para poder alzar esta treceava copa para la casa blanca.
Como ya es costumbre, el estratega francés, Zidane leyó de manera correcta el transcurso del partido, en la primera parte del encuentro tuvo que cambiar su lateral Carvajal por una lesión, en su lugar ingresó el defensor central Nacho, quien ocupó su lugar.
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En el minuto 50 llegó la primera anotación del encuentro, tras un error garrafal del guardameta Karius quien se confió y le entregó el balón totalmente servido para que el delantero Benzemá pudiera marcar su primer tanto.
El guardameta del Liverpool Karius, a pesar de regalar el primer tanto, venía teniendo un buen partido, había sacado más de 3 pelotas claves al conjunto español. Sin embargo sus errores opacaron las buenas intervenciones que tuvo.
Cuatro minutos más tardes, el cuadro inglés consigue empatar el partido, tras un gol de tiro de esquina, donde Mané pudo desviar el balón para que entrara en el pórtico de Keylor Navas.
Por instancias del encuentro, se observó claramente como el Madrid dependía del juego de su volante diez, Luca Módric. Dicho jugador era el encargado en revolucionar el ataque para los ‘merengues’, defendió y colaboró con el marcaje de su equipo.
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Al minuto 60 ingresaba unas de las figuras del partido, el galés Gareth Bale, en lugar del volante español, Isco. El delantero galés, solo tardó tres minutos para marcar una pincelada en la final más importante de toda Europa. Tras recibir un formidable centro del lateral Marcelo, Bale marcó un golazo de chilena quien dejó mudo a todos los espectadores de esta final.
Cabe resaltar que el Real Madrid es el único equipo en la historia, en poder conseguir este trofeo tres veces consecutivas. Al igual que Cristiano Ronaldo quien batió otro record, tras obtener su quinta copa de campeones en su palmarés como profesional.
Gareth Bale en el minuto 83 sella el encuentro, tras marcar el 3-1 definitivo para el cuadro español. Nuevamente el guardameta Karius vuelve a equivocarse después de recibir un potente disparo del delantero del Madrid, quien no pudo desviar el balón e ingresó lamentablemente en su pórtico.
Para finalizar los ‘merengues’ esperan medirse en otra nueva final, ante su rival Atlético Madrid en la final de la Supercopa de Europa.
Síntesis del partido:
Real Madrid: Keylor Navas, Carvajal, Varane, Ramos, Marcelo, Módric, Casemiro, Kross, Isco, Benzemá, Cristiano Ronaldo: 4-3-1-2.
Liverpool: Karius, Arnold, Lovren, Van Dijk, Robertson, Wijnaldum, Hederson, Milner, Mané, Firmino, Salah: 4-3-3.
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— Noticiero 90 Minutos (@Noti90Minutos) May 26, 2018