En estas elecciones nos estamos jugando no solo los próximos 4 años, sino nuestro futuro, el de nuestros hijos y nietos. Cali es una tierra de oportunidades, epicentro del suroccidente colombiano, que impulsa el desarrollo de nuestra región y de todo el país, y aunque en la última década hemos crecido y experimentado cambios, tenemos desafíos que no dan espera. Sin duda, uno de ellos, es la seguridad: Cali no puede seguir siendo la ciudad que más muertes violentas le pone a Colombia y donde sufrimos más robos.
La prioridad en nuestro gobierno será devolverles la seguridad a los caleños y quitarle a Cali la vergonzosa etiqueta de ser la ciudad más violenta del país. Por eso, nuestra gestión estará encaminada a disminuir en 4 años sustancialmente los homicidios. Y eso lo haremos con tres contundentes acciones:
Primero, con inteligencia para enfrentar las organizaciones criminales e identificar los corredores de ilegalidad. Vamos a blindar a Cali y como alcalde seré́ la primera autoridad en materia de seguridad. Atacaremos el hurto, el microtráfico y todo rastro de violencia contra la mujer. A Cali la haremos segura.
Mejoraremos el accionar de la autoridad a través de más inversión en inteligencia, dotación y tecnología, y fortaleceremos la justicia para asegurarnos de que los delincuentes salgan de las calles.
Vamos a instalar Comités de vigilancia vecinales, 200 redes de apoyo entre la policía y la comunidad y crearemos la aplicación ‘A denunciar’ para que los caleños reporten en tiempo real a la policía sus delitos y puedan entregar videos, garantizando una respuesta más rápida.
En temas de tecnología duplicaremos el número de cámaras hasta llegar a 3 mil con reconocimiento de placas; se integrará la red de cámaras, un sistema de alarmas comunitarias y 22 drones de seguridad que se complementarán al helicóptero para vigilar la ciudad.
Segundo, al generar oportunidades en los barrios para que los niños y jóvenes no se vean obligados a caer en la delincuencia conseguiremos alejarlos del flagelo delicuencial. Nuestra estrategia de seguridad será́ integral. El antídoto contra la violencia en Cali es las oportunidades, el empleo y el sano desarrollo individual y familiar.
Nuestro eje central será el ciudadano, le daremos más herramientas de denuncia y un papel fundamental a través de la corresponsabilidad y la cultura ciudadana.
Y tercero, le regresaremos a la ciudad el liderazgo ante el Gobierno Nacional y la región, porque la inseguridad de Cali también obedece a que por décadas por falta de liderazgo, no hemos gestionado adecuadamente las soluciones a problemas nacionales y trasnacionales. No es aceptable que las siembras de coca y el narcotráfico que se encuentran a pocos kilómetros de Cali, no tengan la atención del gobierno central.
Los avances que requiere Cali, se alcanzan si logramos una verdadera integración de seguridad, social y económica; si nos hacemos cargo desde la alcaldía, sin trampas ni politiquería y gestionando efectivamente los recursos que son del ciudadano.
El voto individual e independiente por el futuro y por resolver los problemas presentes será el primer paso para acabar con el desorden público y la inseguridad en nuestras calles; para derrotar la delincuencia y la corrupción.
Cali se la juega toda en las elecciones. Seré un alcalde de cara al ciudadano, responsable de su calidad de vida y prosperidad, y comprometido con el futuro porque lo mío es el servicio público.
Quiero liderar las transformaciones urgentes que requiere nuestra ciudad. A eso me comprometo. Avancemos que Cali volverá a ser grande.
