Hace unos días se jugaba una nueva fecha de la Premier League, donde varios equipos están luchando por ser campeones de la competencia de fútbol local más importante del mundo. Incluyendo el trabajo de algunos por permanecer en primera.
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Sin embargo, las alarmas se encendieron en la Selección Colombia por la salida del defensor Yerson Mosquera, quien había hecho una magnífica presentación contra Argentina. En el último partido de las Eliminatorias Conmebol. Partido que terminó con victoria ‘tricolor’ ante los actuales campeones del mundo.
Además de la anotación del defensor, dio una muy buena sensación respecto al futuro de él con la Selección Colombia. Pero, el panorama actual no es el mejor, al menos en los próximos meses, ya que la lesión de Yerson Mosquera fue oficializada:
“Lamentablemente (los estudios) confirman lesiones en el ligamento colateral medial (LCM) y el ligamento cruzado anterior (LCA)”.
Comenta Phil Hayward, director de alto rendimiento del Wolverhampton, quien continuó:
“En los próximos días visitaremos a especialistas para ultimar el plan de la cirugía; esto se llevará a cabo en las próximas dos semanas”.
Justamente, las lesiones en el ligamento colateral medial (LCM) y el ligamento cruzado anterior (LCA) son algunas de las más comunes y graves que enfrentan los futbolistas. Ambas estructuras son fundamentales para la estabilidad de la rodilla y su correcto funcionamiento, lo que hace que cualquier daño en ellas impacte severamente el rendimiento y la movilidad de los jugadores.
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Lesión del ligamento colateral medial (LCM)
El LCM se encuentra en la parte interna de la rodilla y es responsable de mantener la estabilidad lateral. Las lesiones en este ligamento suelen ocurrir debido a impactos directos o movimientos bruscos que fuerzan la rodilla hacia adentro, como en una entrada fuerte de un oponente.
A su vez, los síntomas incluyen dolor, hinchazón y dificultad para doblar la rodilla. El tratamiento varía desde el uso de inmovilizadores y fisioterapia hasta, en casos graves, la cirugía.
Lesión del ligamento cruzado anterior (LCA)
Por su parte, el LCA es uno de los ligamentos más importantes de la rodilla y se encuentra en su centro. Proporciona estabilidad durante giros y cambios rápidos de dirección, algo muy común en el fútbol.
Asimismo, las lesiones en el LCA suelen ser más serias y a menudo requieren cirugía. Los futbolistas experimentan una pérdida significativa de movilidad, dolor intenso y una sensación de inestabilidad en la rodill; según explica la American Academy of Orthopaedic Surgeons.
Rehabilitación y prevención
Ahora bien, la rehabilitación para ambas lesiones implica reposo, fisioterapia y, en muchos casos, cirugía reconstructiva. La prevención incluye fortalecer los músculos alrededor de la rodilla, mejorar la flexibilidad y realizar ejercicios de propiocepción, que ayudan a mejorar el equilibrio y la estabilidad articular.
Por ende, la lesión de Yerson Mosquera necesita tiempo y un proceso de al menos 7 meses.
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