Los familiares de Stephanie Magón Ramírez, la modelo caleña asesinada en México el viernes pasado, aún no salen del asombro y el dolor que les provocó la noticia y hoy buscan ayuda para poder repatriar el cuerpo de su hija.
Anthony, uno de sus familiares, habló con 90 Minutos y contó cómo era la vida de la caleña de 23 años, que dejó un hijo de 4 años y que llevaba menos de cinco meses en Centroamérica.
"Stephanie era una mujer con muchos sueños, buena madre, estudiosa, emprendedora y tenía el sueño de ser presentadora", aseguró Anthony, quien indicó que la última vez que hablaron con ella fue el pasado jueves.
Su partida hacia México se dio hace cuatro meses, después de que la caleña presentara un casting y se quedara con él y viajara a trabajar con un contrato con una agencia de modelos conocida como New Icon Model Management.
"Hasta ahora no sabemos qué fue lo que pasó. Ella estaba bien, nunca nos habló de algo malo. El día que hablamos con ella la escuchamos tranquila", contó Anthony.
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La noticia de la muerte de Stephanie fue dada a conocer por el Instituto Nacional de Telecomunicaciones, Instel, en Cali, en donde la joven había empezado a estudiar, pero que había abandonado por cumplir compromisos de trabajo en México.
"Hace poco nos hemos enterado de la muerte en extrañas circunstancias de nuestra querida alumna Stephanie Magón Ramírez quien por motivos de su trabajo como Modelo Internacional había viajado a México el pasado mes de mayo en cumplimiento de un importante contrato y numerosos compromisos con agencias de publicidad de ese país. Stephanie estaba cursando en INSTEL los protocolos previos a la certificación y estaba casi lista para la ceremonia de graduación de diciembre próximo. Lamentamos profundamente este hecho que conmueve a toda la comunidad insteliana y le enviamos a su familia nuestra solidaridad, sentimiento de aprecio y las condolencias por la dolorosísima pérdida de este ser maravilloso, buena estudiante, excelente amiga y gran compañera. Paz en su tumba", aseguraron en un comunicado.
Adicionalmente, el dolor de la partida de la joven se suma a la que ya habían vivido con el hermano de la misma, quien murió en Brasil, a donde viajó también como modelo, en una riña que se presentó en una de las favelas donde vivía.
Hoy, la familia busca repatriar el cuerpo de Stephanie y piden el apoyo a la Cancillería para poder realizar los trámites los cuales ya comenzaron a realizar.
"Pedimos el apoyo para que nos ayuden con este caso porque la familia está muy mal, aún no lo entendemos, y no tenemos los recursos para traerla", dijo el familiar.