Un estudio reciente reveló que los hombres se quedan dormidos después de tener sexo porque el cerebro desactiva sus funciones durante el orgasmo.
El científico francés Serge Stolerú llegó a esta conclusión tras escanear el cerebro de varios hombres antes, durante y después de una relación sexual. Con el monitoreo se dio cuenta del cambio en la actividad mental.
Encontró que la corteza cerebral que maneja el pensamiento consciente de las personas, en los hombres se “funde” en el orgasmo. Es decir, baja la actividad cerebral.
El resto del cerebro recibe un mensaje que elimina el deseo sexual. Mediante descargas químicas se libera serotonina, hormona encargada de inducir el sueño.
Otro estudio asociado, publicado por la revista Neurociencia y Bioconducta, revela que la eyaculación está directamente asociada con un bajón en la actividad de la corteza cerebral masculina.
Esto explica por qué las mujeres pueden mantener activas después de llegar al clímax en un encuentro sexual y estar dispuestas al siguiente, mientras los hombres tienden a descansar.
Aunque ya se encontró la razón científica de este comportamiento masculino, aún hay especialistas que insisten en que sólo es un mito.