Tras aquel título en el 2003 logrado de visitante ante el Deportivo Cali, el vinotinto y oro no sabía lo que era ganar un título de liga colombiana, pero los dirigidos por Alberto Gamero le devolvieron esa sensación a la ciudad de Ibagué, que hoy teje su segunda estrella.
El Atanasio se vestía de gala para recibir a los finalistas, Nacional y Tolima, con una actuación de Chocquibtown en la previa, animando lo que sería la fiesta del fútbol. Con pocas variantes, los dirigidos por Almirón buscaban defender la ventaja mínima lograda en el Manuel Murillo Toro, esta vez con las variantes de Macnelly y Braghieri en el cuadro titular. Alberto Gamero le dio confianza a su equipo, pero envió esta vez al banquillo a Omar Albornoz para poner al volante Carlos Robles, pieza clave del encuentro.
El partido se tornó vertiginozo para los “Pijaos”, pues Nacional atacaba constantemente por las bandas y con un gran despliegue de Castellani en la zona de volantes, pero las respuestas del Tolima no se hicieron esperar, de la mano de Sebastián Villa y Angelo Rodríguez, quien sorpresivamente jugó éste encuentro, avisaban al conjunto “Verdolaga”, su necesidad de ganar.
¡PORQUE #MásUnidosQueNunca SE LOGRAN GRANDES VICTORIAS! Felicitaciones @cdtolima por su segunda estrella y a todos los del FPC por el excelente nivel. ????????????????
— AGUILA FÚTBOL (@AguilaFutbol) June 10, 2018
Nacional sucumbe, ya que el segundo tiempo iniciaba con un gol de Sebastián Villa, producto de un desvío en Jorman Campuzano al minuto 47. Sin su “9”, quien debido a las molestias sufridas en la ida cedió su puesto a Marco Pérez para el segundo tiempo, Tolima empezaba a imponerse en Medellín, quien buscaba el manejo del mediocampo con Robayo y Rentería, ante el despliegue de un Castellani que vivía uno de sus mejores partidos. La 17 cobraba fuerza por un cabezazo de Vladimir Hernández al minuto 66, gracias al centro del ex Deportivo Cali, Helibelton Palacios.
Nacional debido al golpe anímico, manejaba los hilos del partido, y se iba ovacionado Braghieri, quien cumplió su función por la banda izquierda, siendo cerrojo de Villa. Ingresaba Camilo Zúñiga al minuto 86, y tres minutos después, recibió la tarjeta roja debido a una brusca entrada.
Lanzados al ataque, un tiro de esquina del Tolima con el arquero Montero jugado, palpitaba la liquidación de los antioqueños, pero la respuesta de Dayro Moreno a la ocasión fue negativa. Al minuto 94, en un tiro de esquina, llega el gol de Danovis Banguero, quien cruzando un remate de cabeza, vence a Fernando Monetti igualando la serie.
La tanda de penaltis no fue piadosa con Nacional, errando los tantos de Reinaldo Lenis y Vladimir Hernández. Tolima fue eficaz, y con 4 cobros exitosos cerrados por Marco Pérez, se consagraron campeones levantando su segundo título de visitantes en el Atanasio Girardot.
Una revancha que Alberto Gamero consigue con el conjunto “Pijao”, gracias a una generación de grandes futbolistas que en medio de las alegrías, despedían a uno de sus pilares, Sebastián Villa, quien hará maletas rumbo a Buenos Aires, con la satisfacción de haber sacado campeón a su equipo.
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