El Instituto Meyer-Hentschel y un centro geriátrico de Berlín, hicieron posible conocer el estado de vejez con el “Traje de Edad”, el cual imita las sensaciones exactas que ocurren durante el proceso de envejecimiento. El traje fue realizado para estudiantes de medicina que pretenden especializarse en el cuidado se personas de la tercera edad y poder comprender y sentir de manera objetiva lo que es ser viejo.
El traje tiene un casco que distorsiona los sonidos y las imágenes generando un efecto de sordera y pérdida de la capacidad visual.
Unas pesas ubicadas en los miembros hacen que los movimientos sean lentos, y unos gruesos guantes para las manos, dificultan la interacción con los objetos.
La experiencia del traje, según quienes lo utilizaron es claustrofóbica y permite sentir lo que la mayoría de ancianos, seguramente, pueden vivir en su cotidianidad.
