En el corregimiento de La Leonera, se encuentra Bichacueyath, un lugar donde la naturaleza cobra vida en cada rincón. Además, es un sitio ideal para las personas que disfrutan del turismo de naturaleza.
Thomas Muñoz, el visionario detrás de este santuario natural, explica que es:
"La parte occidental de los farallones, a unos 1.730 metros sobre el nivel del mar".
Expresó en un video para la Secretaría de Turismo.
Lea también: Orgullo vallecaucano: El Cairo en los premios internacionales ‘Best Tourism Villages’
Sobre la historia de este lugar mágico
El legado histórico de Bichacueyath se remonta a unos 150 años atrás; cuando un antiguo camino real servía de ruta para los primeros colonos de la región. Hoy en día, este camino se ha convertido en un símbolo de conexión con la historia y la tradición local, marcando el inicio de una nueva era centrada en el turismo de naturaleza.
De acuerdo con Muñoz, desde el año 2004, ha dedicado dos décadas de trabajo continuo para transformar Bichacueyath en un refugio para los amantes de la naturaleza y el arte.
"Comenzamos a hablar del turismo de naturaleza y a enfocarlo en un proyecto".
Puntualizó Thomas Muñoz, dueño de Bichacueyath.
Su enfoque meticuloso en la conservación del entorno lo llevó a descubrir el potencial de una planta única: los musgos, que crecen apenas un centímetro al año. Esta fascinación por los musgos lo inspiró a utilizar el arte como una herramienta para concienciar sobre la importancia de preservar la naturaleza.
Por eso empezó a trabajar con el barro como un elemento para transmitir mensajes de conservación. Sus creaciones, que incluyen custodios que parecen observar y proteger el entorno; son un recordatorio constante de la necesidad de cuidar y respetar nuestro medio ambiente.
¿Qué significa Bichacue Yath?
De acuerdo con la página oficial, Bichacue Yath en dialecto Paez significa "santuario de aves". Este espacio busca convertirse en un escenario temático debido a que cuenta con:
- Creación de personajes fantásticos en arcilla (Hadas, duendes, gnomos, etc.)
- Avistamiento y registro de alrededor de sesenta especies de aves.
- Implementación de bio-tecnología como recurso para el aprehendizaje e intercambio de conocimientos.
- Educación ambiental a través de la narrativa y la tradición oral.
- Los recorridos guiados a través del agua, musgos y bosques húmedos.
Artículo relacionado
Sigue nuestras redes sociales: