Las mascotas son unas excelentes compañeras de vida y es un hecho que los animales de compañía, como perros o gatos, se han convertido, en algunos hogares, en un miembro más de la familia, que le brinda a sus dueños un impacto positivo en la salud mental y emocional.
En 90 Minutos hablamos con Yeny Angélica Barrera, una psicóloga que nos cuenta a detalle cuáles son los beneficios a nivel emocional y mental que generan las colas y bigotes en los hogares.
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¿Cuáles son los beneficios que traen las mascotas a la salud mental y emocional de las personas?
En términos de salud mental se habla desde la prevención y el abordaje. Las mascotas en la vida de sus dueños, en términos de prevención, generan que en las personas se reduzcan los niveles de cortisol, que es una hormona que se activa cuando tenemos altos niveles de estrés; y al reducirlos se produce una sensación de felicidad, tranquilidad y de bienestar; en la que funciona la activación de otras hormonas, entre ellas la oxitocina, que los seres humanos segregan cuando sienten amor y se vinculan de una manera adecuada con las mascotas.
Es importante resaltar que con las mascotas tenemos que mantener unos cuidados adecuados y saber la manera de cómo nos relacionamos con estas. Además, se debe tener en cuenta que debe haber un desarrollo de un vínculo entre la persona, es decir quien está a cargo, y la mascota.
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Por otra parte, en términos de abordaje hay una recomendación desde psicoterapia y va dirigida a cuando las personas tienen trastornos de depresión o trastornos de ansiedad, y es que, en algunos casos; se recomienda una mascota de apoyo emocional.
Entonces ¿Por qué se recomienda una mascota de apoyo emocional? Esto se debe a que le ayudan a la persona a sentirse menos sola, al igual que satisface el instinto de protección y cuidado haciéndonos sentir importantes para el compañero peludo.
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¿La presencia de una mascota en la vida de un niño o adolescente puede generar cambios en su forma de relacionarse con los demás?
Las mascotas permiten que los niños y adolescentes empiecen a desarrollar el sentimiento de empatía y mejoren sus habilidades sociales. Cabe destacar que, si los padres de familia adoptan un perro o gato; es crucial que les enseñen a sus hijos los cuidados que deben tener y acompañarlos durante este proceso.
Además, el tener una mascota le genera al niño o adolescente el incremento del sentido de la responsabilidad y su autoestima. En cuanto a la responsabilidad, si el adulto encargado le delega los cuidados de la mascota, el niño o adolescente estará a cargo de su alimentación,paseos, limpieza; por lo que creará una rutina y el sentido de protección hacía esta.
Frente al incremento de autoestima, esto se debe a que el menor se siente responsable e importante; a partir de las respuestas de felicidad brindadas por las mascotas al momento de jugar o compartir con ellas.
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¿Qué efectos tiene la humanización de las mascotas?
Cuando humanizamos mucho la mascota que tenemos a cargo y al extremar un poco esa humanización, se crean unas expectativas supremamente altas y también se genera una dependencia emocional frente a las mascotas. Un ejemplo de esto es cuando se les comienza a vestir, a perfumarlos y a tratarles como si fueran un niño; en este sentido, se genera una dificultad de conducta en los peluditos y generamos una dependencia de estos hacia el ser humano y viceversa.
Ya conociendo esto, ante situaciones de elaboración de duelo, si se ha humanizado al extremo la mascota generamos una situación que posiblemente pueda llevar a la persona a una condición de depresión o ansiedad; dependiendo de la estructura de personalidad que tenga en ese momento.
