El 22 de marzo -día mundial del agua- en Cali se presentaron grandes inundaciones.
Vimos derrumbes, damnificados, movilidad colapsada, quebradas y ríos desbordados.
Causas principales: cayó mayor cantidad de lluvia de lo que ocurre históricamente en un día y las zonas de absorción de las precipitaciones pluviales no dieron abasto.
Esto se presenta porque a lo largo de los últimos 60 años en Cali, se han invadido espacios de humedales como Charco azul y El Pondaje, y en varios kilómetros de las orillas de los ríos se han construido viviendas y edificaciones comerciales, legal o ilegalmente, pero en todo caso ocupando un terreno que debería ser protegido.
Hoy en día, conociendo la gravedad del cambio climático que nos obligará a seguir afrontando inviernos y sequías que sobrepasan lo que consideramos soportable, es de la mayor importancia que el gobierno de Cali garantice que haya criterio técnico y responsabilidad en la dirección del Departamento de Planeación de Distrital. Algo que en este momento está siendo cuestionado:
Cuatro días antes del torrencial aguacero, hubo una tormenta de control político. El 18 de marzo de 2021 en el Concejo se hizo debate a la actuación de Roy Alejandro Barreras al haber expedido una circular en octubre de 2020 con la cual la constructora Cosenza argumenta que tiene permiso para construir siete torres de 14 pisos cada una, con un total de 392 apartamentos en plena zona forestal de protección del río Cali. Léase otra vez: construir en zona forestal de protección del río Cali, lo cual obviamente está prohibido.
Tanto la Sociedad colombiana de arquitectos capítulo Valle del Cauca como el Concejo de Cali han advertido sobre el riesgo de que si el cuestionado proyecto de vivienda avanza, esta zona del río Cali se afectaría por la carga de tantos humanos viviendo donde debería haber árboles conteniendo el agua en caso de nuevas inundaciones.
Lea otras columnas:
https://90minutos.co/la-ola-invernal-y-la-corrupcion-elmer-montana-23-03-2021/
Tarragona es el nombre con que la constructora Cosenza ofrece en venta cada apartamento a 160 millones de pesos.
La constructora Cosenza se registró en la Cámara de comercio de Cali el 2 de marzo de 2018, aunque su publicidad dice que tiene más de diez años construyendo proyectos inmobiliarios. Tal vez antes tenía otro nombre o razón social. Antes de ésta, la propietaria era MECON, de la Sociedad Muñoz Echeverry Construcciones.
Y aunque en la escritura pública se puede leer claramente que estaban comprando una zona verde en la cual NO se podía construir, en 2016 MECON radicó en Planeación Municipal la solitud de que se tomaran las decisiones pertinentes para poder construir en ese predio. El Alcalde anterior y su director jurídico se pronunciaron reafirmando que ese terreno no estaba desafectado, es decir, que seguía protegido como zona forestal.
Con el cambio de gobierno en Cali y con el cambio de razón social del propietario del terreno, el 14 de octubre de 2020 vuelven a radicar la misma solicitud y el director de Planeación de Cali resuelve el caso en una semana, mediante una circular cuyo texto la empresa constructora toma a su favor.
Por todo este historial, el escandalo subió como el caudal de un río en pleno aguacero y el alcalde Jorge Iván Ospina el 18 de marzo publicó en twitter que es imposible permitir técnica, legal y ambientalmente la construcción de apartamentos del conjunto Tarragona.
Obviamente el asunto no se resuelve con un trino; en este momento un equipo de abogados de la Alcaldía debe estar actuando para proteger al Estado, al medio ambiente y a los ciudadanos.
Por su parte, la Sociedad de Arquitectos, el Concejo de Cali, los ambientalistas, periodistas y demás habitantes debemos seguir atentos a prevenir un daño a la naturaleza y a las arcas del municipio, pues no son pocos los ejemplos donde algunos particulares pretenden que el Estado les pague por un pleito que inician pretendiendo desconocer la Ley y luego poniéndose en el papel de víctimas.
En Colombia es muy difícil hacer valer las normas por encima de intereses privados, porque hay quienes quieren hacer creer que el Estado no es de nadie, que no tiene dolientes y que todo funcionario público tiene un precio o un conocido que lo presione para que tuerza lo que no se debe. Incluso hay quienes advierten que si los funcionarios hacen lo correcto le van a llegar muchas demandas.
Incluso el mismo Roy Alejandro Barreras anunció este mes de marzo en rueda de prensa, que gracias a varias denuncias anónimas descubrió que en el interior de Planeación Distrital de Cali se falsifican firmas en documentos de trámites solicitados por ciudadanos; lo cual se tipificaría en el delito de falsedad en documento público. Ante lo cual anunció medidas correctivas y el debido reporte a la Fiscalía.
Señor Alcalde usted sabe bien que elegimos gobiernos para que administren con pulcritud y valentía, para que defiendan lo público, para que actúen según las leyes y normas, aunque el esfuerzo sea grande. Ese es el verdadero honor de ser servidores públicos. No cumplirlo es ser inferior al cargo.
Le puede interesar:
https://90minutos.co/lluvia-blog-lizandro-penagos-18-03-2021/
Sigue nuestras redes sociales:
