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Miss Universo, Ariadna reinarás por siempre

Miss Universo, Ariadna reinarás por siempre

De los 42 y medio millones de colombianos, salvo los que definitivamente son acérrimos y declarados antireinologos, las asociaciones de feministas, los sociólogos de la indiferencia y   los que no les desvelan esos eventos "capitalistas y mercantilistas en los que se utiliza a la mujer", los demás hemos tenido que ver con esa "equivocación" que en cuestión de dos minutos dejó a nuestra compatriota Ariadna Gutiérrez, coronada, sorprendida, descoronada y después transformada en esa heroína, que necesitaba el país, para darse cuenta "que el colombiano aguanta todo".

Y es que este es uno de los momentos que nunca olvidaremos los colombianos. Cómo de la emoción por el triunfo, Ariadna con los ojos del mundo en pleno sobre ella, tuvo que ser despojada de su corona, cetro y eso sí, de lo que más debería molestarnos a los colombianos y latinoamericanos de su sentimiento de superación. Yo me pregunto, hubiera pasado lo mismos, si el error fuera con la señorita de Estados Unidos? Hubieran mandado al desacertado presentador a corregir y echarse una culpa, que le hará perder millonarios contratos, a cambiar el nombre. Si hubiera sido con la señorita Filipinas?

Errar es de humanos pero esto fue como dicen “para no creerlo”. Nunca un presentador de Miss Universo se había equivocado en un fallo, y justo pasa con una colombiana?

Ahí se recuerdo las letras de uno de los grandes periodistas y escritores del país, Daniel Samper Pizano, “tenemos los colombianos esa capacidad de sufrimiento heredada de la medalla de la Cruz de Boyacá”

Para nosotros las cosas son más sufridas para alcanzarlas, que a los que nacieron en otras latitudes. Los golpes de los ciclistas  Lucho Parra y Nairo Quintana han sido más duros que los de sus colegas. Las embarradas de Juan Pablo Montoya, fueron más notorias. Las gestas de cientos de colombianos en Estados Unidos, en su mayoría han sido superadas por su origen.

Pero el colombiano ha surgido siempre, en medio de esa incredulidad de muchos, comenzando por sus propios coterráneos,  por esa capacidad de  resiliencia implícita, forjada a punta de agua de panela con limón, desayuno recalentado, y esa capacidad creativa que no tiene aquellos a los que las latitudes los premiaron con otras condiciones.

Ya veremos a Ariadna regresando al país en medio del carro de los bomberos. Algún canal privado de televisión solicitándole la venta de los derechos para presentar su vida en el prime time. Todos querrán tener una selfie con esta reina, y seguramente abrirá desde el carnaval de Barranquilla, hasta el festival el cuy en Pasto.

Ariadna logró unir a los colombianos en torno su nombre. Y hacernos sentir más que nunca esa estrofa de "hay que orgullosos me siento de ser un buen colombiano".

Miss Universo por dos minutos, Ariadna reinarás en nuestros corazones por siempre.