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¿Está el tenis colombiano en su mejor momento?

¿Está el tenis colombiano en su mejor momento?

Desde los años setenta, el tenis profesional colombiano ha sido motivo de orgullo. Hechos como el ascenso de Santiago Giraldo a la posición 38 de la clasificación ATP o el reconocimiento que obtuvo Fabiola Zuluaga, cuando adquirió, en el 2005, el puesto número 16 en el escalafón femenino reafirman que en Colombia se forman deportistas de calidad.

La fórmula del éxito ha tenido diversos ingredientes. Sin duda, los más importantes han sido la perseverancia, el sacrificio y el esfuerzo de los mismos jugadores, ya que muchos de ellos iniciaron como jóvenes que simplemente tenían un sueño y necesitaban el apoyo para materializarlo.

Recordemos cómo, por ejemplo, en la década de los noventas, tuvimos una generación que, paso a paso, se fue ganando el respeto de sus contrincantes. Allí estuvo Mauricio Hadad que, en 1995, entró entre los 100 mejores del mundo.

Después vino Catalina Castaño, quien fue número 35 en el tenis femenino; Alejandro Falla, puesto 48 en 2012; Alejandro González, posición 76 en 2014; Mariana Duque, 74 en 2016; y la dupla conformada por Juan Sebastián Cabal y Robert Farah quienes, también en este último año, subieron al tercer lugar en la clasificación de dobles.

Todos, desde muy pequeños, salieron del país, vivieron nuevas experiencias, conocieron personas diferentes, se alejaron de su familia, entrenaron fuertemente, cambiaron sus hábitos y buscaron más oportunidades.

Pero siempre tuvieron el apoyo de un equipo interdisciplinario. Médicos, entrenadores y personal administrativo que, desde Colombia, han dado su máximo esfuerzo para contribuir a que el país se posicione como un duro rival en el deporte.

Por supuesto que hemos tenido momentos difíciles, derrotas que les han enseñado a nuestros jugadores  a no conformarse, a seguir preparándose, a no rendirse. Es allí donde hemos conocido su valor, ya que los hemos visto levantarse, mantener la cabeza en alto y continuar con su camino al ascenso.

No obstante, todavía hay varios retos. Es importante incentivar a las nuevas generaciones, inculcarles el valor de ser deportista y de mantenerse saludable, enseñarles lo apasionante que puede ser entrar en la cancha y darlo todo. Impulsarlos al profesionalismo, siempre con dedicación y trabajo duro.

Es importante demostrarles que sí se puede. Solo por poner un ejemplo, cerca del 20% de las personas que se entrenaron con Colsanitas llegaron a la élite. Esto se debe a que, desde un principio, la entidad se mentalizó que quería formar a jóvenes para que se ubicaran en el Top 100.

Se concentraron en los mejores, por eso suspendieron, por un tiempo, la escuela de formación. Pero como estaban convencidos que, para destacarse en el exterior, hay que trabajar unidos, decidieron regresar y conformar una alianza con la Liga de Tenis de Bogotá.

Colsanitas continuará con el proyecto que inició hace más de 20 años y que le ha traído tantos triunfos a Colombia, se retomará el camino y se apostará por aquellos jóvenes con proyección que desean salir adelante.

Es por esta razón que, en los próximos días, darán a conocer un nuevo equipo de tenistas. Jóvenes, de diferentes regiones, que prometen dejar en alto la cara de Colombia y que, con el esfuerzo de todo el equipo, estamos seguros nos harán sentir orgullosos.

De esta manera, no solo se continuará el trabajo de internacionalizar el talento local, también se buscará fomentar los buenos hábitos, el deporte y la salud. Todo por el bienestar de las futuras generaciones.