Luego de que se anunció que el Hospital Universitario del Valle se someterá a la Ley 550 en un nuevo intento por salvarlo de la liquidación, la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, añadió que como intervención económica, por lo menos 594 empleos se recortarán de la nómina.
Noticia que cayó como balde de agua fría entre los empleados del centro asistencial que desde el anuncio de la mandataria se declararon en asamblea permanente. Se temía que la tensión por parte de los empleados ocasionara disturbios a manera de protesta.
En este momento, los afectados se encuentran reunidos en uno de los auditorios del hospital junto con Juan Carlos Corrales Barona, gerente del HUV, en un intento por exponer los argumentos de cada una de las partes y alivianar el traumatismo que ha causado la determinación.
“En esta reingeniería suspendimos 61 encargos, muchos sin justificación y que superaban los 20 años, trasgrediendo toda norma; eliminamos de manera definitiva 400 cargos que estaban vacantes, y logramos salvar 1.352 empleos evitando la desvinculación de más trabajadores y sus familias, como hubiera ocurrido de continuar con la misma dinámica de desorden”, dijo la Gobernadora quien además puntualizó que de haberse liquidado el centro hospitalario tal como lo contemplaba el Gobierno Nacional, se hubieran perdido alrededor de 2.350 empleos.
Esta transformación estructural de la nómina le permitiría al centro hospitalario contar con el personal y los insumos necesarios para dedicarse especialmente a casos de alta complejidad, abandonando actividades y servicios que hoy encarecen sus costos.
Es decir, servicios como lavandería que podrían ser prestados por terceros para reducir en gran cantidad los gastos del hospital, al igual que el despido de medios mandos que demandan un gran costo nominal.
En consecuencia, desde muy temprano los afectados están discutiendo la situación con el Gerente del HUV, pues están consternados por la noticia. El presidente de Sintrahospiclínicas, Jorge Rodríguez, dijo a Blu Radio que la noche anterior el Esmad se había tomado las instalaciones del Hospital y que posteriormente fueron reemplazados por oficiales de la Policía Nacional, lo cual reprochó y exigió, a través de la cadena radial, el retiro de las mismas.
“Esta reforma administrativa se está haciendo a espaldas de los trabajadores, porque con la acogida a la Ley 550 están presentando la nueva planta de cargos del HUV, se ha especulado, se habla de 591 personas que serán despedidas del hospital. Al interior del univeristario se dice que desaparecerá la central de estabilización que es la columna vertebral de las salas de operaciones” dijo, al diario El País, el líder sindicalista que se opone rotundamente a que el HUV se acoja a la Ley 550.
“El temor entre los trabajadores existe porque hace 15 días se llevaron las historia laborales de los trabajadores, hoy (ayer) salió la resolución donde le dicen que todas las personas que están en vacaciones deben reintegrarse de manera inmediata por necesidad del servicio”, añadió Rodríguez al mismo medio.
Por su parte el senador Jorge Iván Ospina, explicó a El País que el HUV tiene que acogerse la Ley 550 por las dificultades en sus cuentas por pagar y porque está operando para cancelar pasivos heredados irresponsablemente por la administración Urriago – Rubiano.
“No creo que el HUV prescinda de personal de planta, pero es muy probable que dentro de la gran masa de trabajadores, quienes sufran la perdida de vinculación laboral sean los contratistas (…) Si no se difieren los pagos de las deudas del hospital como mínimo a diez años, no hay posibilidades futuras de que el HUV se desarrolle y salga adelante”, concluyó en dicho medio, el exalcalde de Cali.
