Rebosante de alegría, porque la vida, según él le daba “una nueva oportunidad”, que hasta le permitió parodiar que estaba “Tocando el Cielo” y que “gracias a los médicos” podía continuar “construyendo Sueños”.
Era la tarde del 7 de septiembre de 2007. Así recibió el creador y director del Grupo Niche, Jairo Varela, a los periodistas de prensa, radio y televisión agolpados en el cuarto piso del Centro Médico Imbanaco, minutos antes de abandonar la institución, donde permaneció por 4 días, tras superar un infarto agudo al miocardio y reponerse de una sofisticada intervención (cateterismo intervencionista) que recuperó la arteria que puso en “jaque” su corazón.
Tuvo el ánimo y la disposición para contarles en detalle “lo berraco que es un infarto. El dolor en el pecho tan impresionante, tan intenso, que no se puede describir”. Y la gran felicidad que le producía poder continuar en esa nueva producción musical con paradójicos títulos: “Tocando el Cielo”, con título central, “Construyendo Sueños”.
“Ya tengo el 50 por ciento de esta producción y no saben amigos la dicha y la satisfacción que me produce poder estar aquí y estar vivo para terminar este nuevo trabajo musical”,dijo, mientras sonreía, al tiempo que agradecía todos los llamados de solidaridad de la gente de Cali, de Colombia y de otros países como Estados Unidos, México, Venezuela, Chile, Argentina, Perú y España, entre otros, desde donde lo llamaron día a día para saber de su estado.
“Lo mío es un milagro. Siempre fui reacio a ir al médico. La semana pasada y ese día (el domingo pasado) tuve dolor en el pecho, al comienzo leve, después en la noche me puse más mal. Fue la insistencia de mi esposa Damaris la que me trajo hasta los médicos y eso me salvó la vida”,contó
“Lo demás, ustedes ya lo saben – dijo y continuó: – hice un infarto agudo. Gracias a Dios y a los médicos que me dan esta oportunidad de estar vivo. Un infarto es algo muy grave. Por fortuna la ciencia médica ha avanzado, la capacidad de los médicos es impresionante. Me siento muy bien de salud, estoy pleno, como se dice estoy ´reencauchado´ ”,y dejó escapar una larga sonrisa.
Cateterismo Intervencionista
Varela había ingresado a las 1 y 50 de la madrugada del lunes 3 de septiembre de 1977, a Urgencias del Centro Médico Imbanaco. Muy hipertenso, con dolor en el pecho y“con un infarto agudo del miocardio en evolución”.
A las 2 y 30 de la madrugada fue intervenido por cateterismo. Dos dispositivos (stent) fueron guiados por los cardiólogos, navegando por su sistema arterial hasta llegar al corazón, a la arteria obstruida. Un procedimiento de alta tecnología (cateterismo intervensionista) que evitó la cirugía convencional a corazón abierto. El procedimiento duró 50 minutos y sacó al músico del infarto.
“Han sido unos días (4) de mucha reflexión, que me han llevado a replantear mi vida. Sé que debo atender las recomendaciones de los médicos. Voy a cambiar unos cuantos hábitos. Por ejemplo, debo decirle no más al cigarrillo que me estaba matando. Yo ya estaba por los 8 paquetes diarios. Esto es aterrador. Un suicidio”, dijo entonces, con su propio asombro.
“El maestro es un hombre muy fuerte. Su recuperación estuvo por encima de nuestras expectativas y eso nos complace. Fue muy receptivo con nuestro manejo y muy positivo. Un buen paciente. Eso contribuyó a su evolución y nos deja muy satisfechos con los resultados”,fue el balance que presentó el doctor Carlos Eduardo Tenorio, cardiólogo y hemodinamista, del Centro Médico Imbanaco, quien intervino al autor del “Cali Pachanguero”
Según el doctor Tenorio, el último estudio radiográfico del tórax fue satisfactorio, “esto sumado a la estabilidad de su cuadro clínico, su ritmo cardiaco y su presión arterial determinó su egreso de la Clínica”, dijo el cardiólogo al momento de firmar la salida del paciente.
Según el especialista, Jairo Varela podía reintegrase en cuestión de unas dos semanas a su trabajo artístico, es decir a la producción de “Tocando el Cielo - Construyendo Sueños”.
“El maestro es doblemente afortunado, pues no sólo superó un estado crítico, sino que por su profesión, podrá reintegrarse casi de inmediato a su trabajo artístico y creativo, porque no demanda esfuerzo de su capacidad cardiaca”,agregaba, entonces, el doctor Tenorio.
Según los médicos, el estado del creador y Director del Grupo Niche, podía continuar mejorando en la médica en que emprendiera un programa de rehabilitación cardiaca, con ejercicio físico diario y poco a poco, manteniendo su corazón estable hemodinámicamente. Debía continuar el control médico para evaluar el estado de las arterias y evitar su posible obstrucción.
Por su parte el compositor del “Cali Pachanguero”, “Buenaventura y Caney”, “Mi Valle del Cauca” y “Una Aventura”, entre otras, se comprometía ante los medios a no volver a fumar, a consumir una dieta libre de grasas, a hacer ejercicio físico, a atender al pie de la letra las recomendaciones de los médicos y sobre todo a “Hacer lo que diga el corazón”.
Texto cortesía del Centro Médico Imbanaco
