El pasado viernes 22 de febrero hallaron en medio de la selva amazónica los restos de una ballena jorobada de aproximadamente 11 metros de largo en medio de la vegetación, a pocos metros del océano. Esta situación fue reportada por la ONG ‘Bicho D’agua Institute’ a través de sus redes sociales.
El triste hallazgo ocurrió en medio de la maleza de la isla Marajó, exactamente en la desembocadura del río Amazonas. De acuerdo a la ONG, la ballena fue tenía un año de vida y fue encontrada a unos 15 metros de la playa.
Los científicos de la organización ‘Bicho D’agua’ afirmaron, a través de su cuenta de Facebook, que el cetáceo podría haberse enredado en las plantas que se encuentran en la orilla del mar, luego de ser arrojada por las olas gigantes.
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La especialista en marina Renata Emin, de acuerdo a lo publicado en el diario ‘Daily Mail’, “junto con lo extraño que es encontrar a la ballena varada, también nos asombra que haya estado en la costa norte de Brasil durante febrero, algo que es inusual en estas fechas”.
Según el diario ‘Emol’, algunos científicos aseguran que “las jorobadas usualmente no viajan hacia el norte. Por lo que se cree que era una cría que viajaba junto a su madre pero que se perdió durante el ciclo migratorio”.
Planean abrir el cadáver, para poder extraer muestras y así enviarlas a un laboratorio donde serán analizadas y podrán saber con exactitud cuál fue la causa de muerte del animal; esta autopsia durará alrededor de 10 días, pero en este momento, no hay planes de remover la ballena debido al lugar donde se encuentra y a su tamaño.
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