Tras varios intentos de reubicación, quejas y reclamos, el sitio de transferencia de residuos de construcción y demolición, RCD, cumplirá veinte años en el sector del barrio Mariano Ramos, en el oriente de Cali.
La presencia de esta montaña de escombros, conocida popularmente como la escombrera de la 50 por su ubicación (avenida Simón Bolívar con carrera 50), es una problemática que hasta el momento ninguna administración local ha podido solucionar.
Es importante destacar que desde el año 2012 se empezó a considerar el cierre de este lugar, debido a que representaba un impacto ambiental para el sector y además era un sitio de transferencia que no contaba con ningún permiso.
Desde entonces, los directores que han pasado por el Dagma han anunciado diferentes fechas de cierre pero ninguna se ha cumplido.
Luego, en el 2013 inició la limpieza del lugar y se removieron más de 39 mil metros cúbicos de RCD. En ese momento se empezó discutir sobre algunas acciones que ayudaran a mitigar el impacto ambiental y darle una solución al problema.
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Sin embargo, como no se ha podido conseguir otro sitio para la disposición final de los residuos, por orden de un juez se determinó que la escombrera de la 50 debía seguir funcionando hasta que el municipio resolviera un nuevo lugar.
En el mismo año 2013, el Dagma le presentó a Planeación Municipal un estudio sobre los posibles lugares que se podrían usar como sitios de transferencia, pero esto no pasó del papel.
De acuerdo con el artículo 174 del Plan de Ordenamiento Territorial, POT, el municipio de Cali, debe establecer como mínimo dos estaciones de transferencia dentro de la ciudad para la disposición de los RCD. Sugiere algunos que tienen factibilidad y ordena la construcción de un parque ambiental y tecnológico para la gestión integral de residuos sólidos.
A pesar de esto, no se ha logrado concretar ninguna de las propuestas hasta el momento.
Adicionalmente, un estudio de caracterización realizado por la Universidad del Valle, determinó que en Cali se disponen 3.500 metros cúbicos de RCD y no se cuenta con un sitio para su disposición final, lo cual representa un grave problema para la ciudad.
Posteriormente, en el año 2017, en el nuevo gobierno de Cali, también se hicieron anuncios de cierres de la mal llamada escombrera de la 50, pues el Dagma ya tenía un punto definido para trasladar los residuos y era en la antigua base operativa de la empresa de buses Verde Plateada.
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Pero en su momento, la comunidad del sector rechazó la decisión de la administración municipal, razón por la que el proceso quedó frenado.
Posteriormente, la escombrera pasó a manos de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos Municipales, UAESPM, con la reforma administrativa que se realizó el año anterior el alcalde Maurice Armitage. Asimismo, intentaron buscar la forma de cerrar la escombrera de la 50, porque la ley así lo ordena.
El interrogante a la fecha es: ¿qué harán esta vez? Según Rubén Olarte, el director de la UAESPM, hay dos lotes que tienen contemplados para el traslado de los RCD: uno estaría ubicado en Palmira y otro cerca al Paso del Comercio, pero aún se encuentran en estudios.
Por ahora, el Municipio deberá apostarle al parque ambiental y tecnológico, pues aquí además de recibir los residuos, también se les daría un aprovechamiento ecológico, tal como lo indica la ley.
Finalmente, la escombrera continúa operando, pero cada vez colapsa más, en menos tiempo y ya alcanza los 12 metros de altura.
90 Minutos emitió la noticia sobre el deslizamiento de residuos sobre la vía pública que ocurrió el 6 de febrero:
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#EnDetalle Para responder a esta situación, las autoridades anunciaron a finales de enero la creación de bloque de búsqueda encargado de dar con el paradero de los perdidos en Cali. https://t.co/EG8nEVyCmb
— Noticiero 90 Minutos (@Noti90Minutos) February 16, 2018
