Una de las consultas médicas que más genera estrés entre los niños y adultos es la odontológica, situación que se complica aún más cuando el paciente tiene una discapacidad física o cognitiva.
A los cuidados de salud oral, buena alimentación y de higiene bucal propios de la vida en el hogar, se debe sumar una atención integral a este tipo de personas que logre garantizar a sus familias que la situación bucodental del paciente no sea una limitante en su vida cotidiana.
El primer paso para un buen cuidado dental es la confianza. El paciente pediátrico y el de cualquier edad necesita ver al odontólogo como un amigo, alguien que trate las enfermedades bucales y sus consecuencias de una manera humanizada, situación que conduce a una práctica clínica diferenciada, evolutiva y pertinente.
Esa es justamente la filosofía social de la Fundación Clínica Infantil Club Noel: acoger a pacientes de diferentes edades con dificultades físicas y congnitivas para realizar tratamientos odontológicos de complejidad, provenientes de diferentes zonas de la región con calidad y responsabilidad social.
Todo esto, ofreciendo seguridad y atención con personal responsable, comprometido, competente y calificado.
