El municipio brasileño de Mangaratiba anunció este lunes que ha multado al futbolista Neymar por unas obras que ha hecho en su casa de playa en esa ciudad del estado de Río de Janeiro.
De igual manera, esta construcción fue suspendida por las autoridades medioambientales.
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La multa fue fijada en 16 millones de reales (3,3 millones de dólares o tres millones de euros) y se refiere a la construcción de un lago artificial en los amplios jardines de la residencia.
Hace dos semanas, la residencia fue visita por las autoridades medioambientales, que descubrieron diversas irregularidades.
Por ende, embargaron las obras y prohibieron el uso del lago, una decisión que el futbolista luego incumplió, según vídeos publicados en internet con imágenes de una fiesta que ofreció unos días después.
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Entre las irregularidades detectadas, figuran el desvío del curso de unos riachuelos, la captación de agua de un río sin autorización, excavaciones prohibidas, un movimiento irregular de rocas y tierra.
Además del uso de arena de la playa cercana a la casa de Neymar.
Las obras estaban siendo realizadas en el condominio Aero Rural, vecino al de Portobello, donde existe otra lujosa mansión de unos 5.000 metros cuadrados.
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