El empate a un gol en la noche del lunes frente al Pereira, sirvió para que los hinchas americanos se aferren a un milagro para estar nuevamente en una final del Torneo Postobón en el 2014 y así, luchar por el anhelado sueño de regresar a la primera división del fútbol colombiano.
El agónico empate conseguido por Stiven Lucumí, hizo crecer la esperanza de los diablos rojos que se medirán este jueves frente a Río Negro en el Pascual Guerrero, en busca de una victoria que lo acerque a la final del segundo semestre; siempre y cuando, el Pereira no consiga ningún punto en su visita al Unión Magdalena en Ciénaga.
El punto conseguido en la capital risaraldense permitió que América sumara seis unidades y con una fecha en disputa, solamente un triunfo en casa le permitirá soñar con el ascenso en diciembre.
El fútbol demostrado en el Hernán Ramírez Villegas, fue claro y con permitió generar muchas más opciones de gol en comparación con encuentros anteriores. Actitud, que hizo un partido emocionante en la noche del lunes donde los dos arqueros se convirtieron en protagonistas.
La igualdad ante el Pereira, no permitió que el grupo quedara cerrado, puesto que una victoria de los matecañas lo aseguraba como finalista del Grupo B.
De esta manera, el próximo jueves, tanto América, como Pereira y Río Negro, tienen opciones de ser finalistas del segundo semestre.
