Miembros de la Policía del departamento del Chocó, destruyeron en las última horas maquinaria pesada que era utilizada por las Farc en alianza con la banda criminal ‘Los Urabeños’ para extraer oro ilegalmente.
En un comunicado oficial de la Policía, se explica que para la extracción del oro se utilizaban grandes cantidades de mercurio y cianuro, que posteriormente eran arrojados a los ríos Atrato, Negúa e Ichó, afluentes que abastecen de agua a las poblaciones de Quibdó, Condoto y Nóvita, entre otras.
Según cálculos de la Unidad Nacional de Intervención Contra la Minería Ilegal del Gobierno, en las tres áreas del Chocó en las que operaban las 7 máquinas destruidas se extraían mensualmente unos 15.000 gramos de oro. Para extraer 1 gramo de oro se necesitan 1.000 litros de agua por segundo y 5 gramos de mercurio, y se calcula que un día de explotación de oro requiere la misma cantidad de agua que necesitaría diariamente una ciudad de unos 600.000 habitantes.
De acuerdo a muestras tomadas por ingenieros y biólogos de dicha entidad, "los afluentes perdieron el color natural y tomaron una tonalidad verde, que demuestra la desaparición de cualquier especie".
Se calcula que el daño a los recursos naturales generado en la zona a causa la minería ilegal indiscriminada, tardará más de 200 años en recuperarse.
