El nuevo código de Policía presenta 41 demandas ante la Corte Constitucional sin estar todavía vigente. Entre los argumentos se encuentra el exceso de facultades entregadas a los integrantes de esta institución, los cuales, según los demandantes, vulnerarían la libertad de las personas, atentarían el derecho a la protesta, entre otras.
Hasta ahora, siete de las 41 demandas presentadas no fueron admitidas, otras siete están en el plazo para ser corregidas, nueve ya están en trámite y avanzadas en los despachos de los magistrados y otras 18 apenas fueron repartidas.
Como tal, dicho código es presentado como una herramienta necesaria para la Policía y el Ministerio de Defensa en ejercicio de su labor dentro de las ciudades y entrará en vigencia el próximo 30 de enero, además pretende incluir la capacidad de multas por colarse en los sistemas de transporte masivo, arrojar basuras, consumir licor o drogas en lugares públicos, incluso por tener relaciones sexuales en espacios inadecuados; también le facilitará el ingreso de las autoridades a las viviendas sin orden judicial en el caso de incendios, así como para detener altercados entre vecinos.
La controversia se ha generado en particulares, congresistas, juristas y voceros de organizaciones de Derechos Humanos, que opinan se le está entregando excesivas facultades a la Policía, sin especificar la ejecución de los procedimientos.