Con 486 votos a favor, 147 en contra y 41 abstenciones, el Parlamento Europeo aprobó el tratado de libre comercio entre el viejo continente, Colombia y Perú.
El acuerdo comercial entre la Unión Europea y los dos países suramericanos había sido negociado en 2010 y firmado el 26 de junio de 2012, pero sólo hasta esta semana, el PE dio su respaldo determinado a la iniciativa en Estrasburgo, Francia, al culminar el proceso de verificación jurídica y la traducción del mismo en 23 lenguas oficiales de la UE.
Afirma un comunicado oficial de la Comisión Europea, liderado por el diputado conservador, portugués, Mario David, que el TLC eliminará paulatinamente los aranceles sobre exportaciones e importaciones.
De igual manera, señala el eurodiputado que el acuerdo comercial liberará los mercados de servicios y la contratación pública.
En Colombia, los comerciantes más beneficiados con el acuerdo son el sector frutícola, especialmente zonas bananeras y viñedos, e igualmente, el sector pesquero, particularmente en el renglón de los langostinos, de gran aceptación en el mercado europeo.
En Europa, esperan que el sector productivo automotriz, el de la maquinaria y la industria química sean los más favorecidos con el recién aprobado tratado de libre comercio con los dos países andinos.
Petición expresa del Parlamento Europeo, Colombia y Perú expusieron sus bitácoras para garantizar la protección de los derechos humanos, el medio ambiente y los derechos laborales y evitar una descompensación social y económica.
De acuerdo con las previsiones de la Comisión Europea, el acuerdo incrementará un 1,3 % el PIB colombiano, mientras que los exportadores europeos ahorrarían cerca de 270 millones de euros anuales en el pago de aranceles.
El tratado incluye cláusulas que permiten su suspensión en caso de agravios a los derechos humanos, laborales o medioambientales.
Incluso en Europa, algunas ONG y sindicatos habían denunciado, antes del voto, violencia, impunidad y agresiones cometidas contra defensores de los derechos humanos y líderes sindicales, especialmente en Colombia, y han reiterado a la Eurocámara su rechazo a la aplicación del TLC en tales condiciones.
Momentos previos a la votación, los eurodiputados rechazaron una propuesta hecha por el alemán de Izquierda Unitaria Europea, Helmut Scholz, quien recomendaba devolver el texto a la Comisión Europea para su renegociación, ya que ese grupo político y el Partido Verde no estaban de acuerdo con las condiciones del acuerdo.
No obstante, eurodiputados principalmente de Los Verdes e Izquierda Unitaria mantienen su preocupación sobre estas cuestiones y han votado en contra del pacto.
