Tras un operativo de la Policía Metropolitana de Cali en una de las viviendas del barrio Ciudad Jardín, en el sur de la ciudad, los agentes se percataron de un ruido extraño en una de las habitaciones. Al ingresar, encontraron en una jaula lo que sería un ocelote o tigrillo en su interior.
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Rápidamente, las autoridades prendieron las alarmas y se comunicaron con Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, Dagma.
El grupo de Calidad Ambiental y de Inspección, Vigilancia y Control de Fauna Silvestre del Dagma, al llegar al sitio, evidenciaron que el tigrillo se encontraba con las mínimas normas de ventilación y durante una hora para el ingreso a la habitación, lograron el rescate del animal.
"El felino estaba en cautiverio en un lugar donde no recibía el sol, eso hace que el color del pelaje del animal cambie y el crecimiento del felino también se vea afectado. Además, se evidencia que le han dado alimentados cocinados, lo que va a hacer compleja su recuperación".
Sara Rodas, subdirectora Calidad Ambiental Dagma.
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Además, las autoridades ambientales han denunciado que esta situación podría señalarse como un presunto tráfico ilegal de fauna silvestre.
Finalmente, el tigrillo fue enviado al hogar de paso del Dagma para realizarle las medidas de control y establecer el estado de salud del animal.
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