Mientras esperaba en un taxi para ser atendida de urgencia, una mujer identificada como Belinda Aztaiza, de 48 años, falleció después de haberse realizado un procedimiento estético en el que se practicó tres cirugías simultaneas.
Tras la intervención quirúrgica, la paciente se encontraba estable y fue dada de alta pero horas más tarde estando en su casa su situación se complicó, razón por la cual fue llevada por sus familiares a la Clínica Colombia, ubicada en el sur de Cali, lugar en el que le habían realizado una intervención estética de glúteos, senos y liposucción.
El fallecimiento de la paciente dentro del taxi en el que se transportaba, ocurrió porque el vigilante de urgencias del centro asistencial no permitió la entrada a la mujer y tampoco dispuso una camilla para su deceso del vehículo a pesar de la solicitud de colaboración que le hizo la hija de Belinda, quien minutos después se percató de que su madre ya había dejado de respirar.
El secretario de salud, Alexander Duran, dijo que el caso está siendo investigado y reveló que el procedimiento no es realizado por la clínica directamente, sino que las salas de cirugía son alquiladas a terceros para este tipo de intervenciones con el agravante de que no se le realiza un seguimiento al paciente postoperatorio.
Sin embargo, el funcionario admite que hubo negligencia por parte del personal del centro médico ya que es claro que este tipo de casos de urgencia debe ser atendido de inmediato, sin excusa alguna.