El Concejo Municipal inició el estudio de la propuesta que busca la implementación del cobro por congestión voluntario, para quienes quieran usar sus vehículos durante el pico y placa.
Un monto de $2.578.680 al año, es la tasa contemplada para los caleños que quieran circular sin restricción, en el proyecto que se presentó el pasado viernes ante el Cabildo Municipal. Los dineros recaudados serían destinados a la financiación del Mío, construcción o mejoramiento de las vías, andenes, ciclorrutas y hasta inversión en programas de contra la contaminación ambiental vehicular, según propone la iniciativa.
El estudio fue recibido con algunas dudas y reparos por parte de los concejales. Roberto Rodríguez, por ejemplo, no encontró en el proyecto un intento por solucionar la actual situación que padece la ciudad en el tema de movilidad “esperaba un estudio técnico donde se presentaran planteamientos para mejorar la movilidad o, al menos, un plan para disminuir las incidencias en su aplicación, como la afectación al sector de los vehículos no favorecidos, el plan para contrarrestar futuros traumatismos viales y el deterioro al medio ambiente; pero es claro que esa no es la prioridad”. Además, reiteró que el proyecto solamente se refiere a los vehículos y olvida el incremento excesivo de las motocicletas.
De la misma forma, la concejal Patricia Molina aseveró que la prioridad de este proyecto “es buscar la plata para poder solucionarle los problemas financieros a los operadores del MÍO, no mejorar la movilidad de los ciudadanos caleños”.
Sin embargo, no todos se oponen a la propuesta. El concejal Carlos Andrés Arias aseguró que es viable y legal, y que estaría dispuesto a apoyar el proyecto “siempre y cuando no se aumente a cuatro dígitos la restricción y se haga una verdadera depuración del listado de exentos. De allí tienen que salir los vehículos que aparecen como indeterminados, que son los que la gente vendió y dejó el traspaso abierto y hoy no tienen un dueño real, esos son más de 16.000 casos y ahí podría haber una anormalidad”.
¿Cuántas personas estarían dispuestas a pagar?
Esta pregunta ha sido la gran polémica desde que se dio a conocer la iniciativa por parte de la Administración Municipal. La verdad de todo, es que ni siquiera en el proyecto se sabe a ciencia cierta la cantidad de caleños que pagarían los $2.578.680. Así lo confirmó Diego Sardi de Lima, ponente de la propuesta, en una entrevista realizada por el diario El País.
El concejal explicó que el proyecto se está basando en un estudio realizado en la ciudad de Medellín donde el 4% de los ciudadanos está dispuesto a pagar. Con este resultado, estiman que 14.000 carros acogerían la medida y entrarían a circulación. “¿Esos 14.000 carros que van a pagar empeorarían la situación en las vías? Sí ¿Eso colapsa la ciudad? No, porque hay estudios que sustentan que si salen, la situación no va a ser diferente a la actual. Esto no va a colapsar ni a mejorar la ciudad”.
Sardi de Lima dijo estar de acuerdo también con el pico y placa de 4 dígitos como estrategia para reducir el uso del carro particular y admitió que es factible la probabilidad de que las personas compren otro carro o moto en vez de pagar. “Según las estimaciones, en los próximos diez años los vehículos se duplicarán y las motos se triplicarán, eso habrá que regularlo. Está demostrado que el pico y placa a largo plazo aumenta la congestión en las ciudades”.
Tenga en cuenta
A diario, según Secretaría de Tránsito 76.170 vehículos dejan de circular gracias a la restricción de pico y placa. Con la medida, esta cifra se reduciría a 61.370 ya que, según se estima, ingresarían 14.800 autos al flujo vehicular.
