El DAGMA realizará la liberación de 12 babillas bebés que se encuentran ubicadas en el sur de la ciudad.
Los encargados lograron retirar dos babillas en horas de la mañana, las cuales pasaran por un periodo de cuarentena para que puedan volver a su hábitat natural.
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“Retirar una babilla es muy complejo, nos puede tomar días, incluso semanas y por eso es una actividad que la hacemos paulatinamente porque no todo el tiempo están visibles”.
Explicó el subdirector del DAGMA Oscar Villani.
Además de esto, aseguró que las babillas no son de este ecosistema y por eso recomiendan a la comunidad que no les den comida, tampoco tirarles residuos en su zona de hábitat.
Las personas aledañas al lago piden que se les de las recomendaciones necesarias para que puedan cuidar a las babillas, pues, sienten que ya son parte del lugar y de la ciudad.
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Sin embargo, se debe tener en cuenta que hace dos años una babilla falleció al intoxicarse con una bolsa que contenía excremento de perro.
“Se van a trasladar por su bienestar y el de la comunidad, finalmente esta es una zona urbana y ellas deben estar en su hábitat natural".
Comunicó Villani.
Finalmente, desde la organización ambiental de la ciudad, piden a las personas aledañas al Lago de la Babilla, que puedan respetar y cuidar de una buena manera la forma de convivir de estos reptiles, mientras se realiza el proceso de liberación.
Vea información del proceso:
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