Ante el Tribunal de Arbitramiento de la Cámara de Comercio de Cali, se definirá el próximo 16 de diciembre la sanción por alrededor de 300 mil millones de pesos que la Alcaldía de Cali tendría que pagarle a los operadores del Mío Git Masivo y Unimetro, por el incumplimiento de acuerdos.
De acuerdo con el otrosí firmado entre la Alcaldía y los operadores del sistema, en diciembre de 2014, la administración municipal debía retirar el total de buses de servicio público tradicional antes de 8 de agosto de 2015, hecho que no fue realizado y que, según los operadores, sigue impidiendo que el Mío tenga mejores resultados.
"No solamente Unimetro, todos los operadores tienen un límite y los accionistas ya no tienen cómo reponer lo que se está perdiendo. El sistema mensualmente arroja negativos de 15 mil millones de pesos", aseguró Sebastian Nieto, gerente de Unimetro.
Asimismo, el funcionario indicó que además de no haber sacado el transporte público tradicional, la Alcaldía también se había comprometido a terminar obras de infraestructura del Mío que están a medio andar.
"Nosotros teníamos unos acuerdos bien establecidos y un cronograma muy claro y la verdad, es que hoy aún tenemos 10 empresas, 24 rutas y 500 tarjetas de operación vigente", señaló Nieto.
También, los dos operadores reclaman la remuneración adecuada de los consecionarios, ya que se han presentado dilaciones en los pagos y algunos se han hecho de forma incompleta.
"Hay una cantidad de incumplimientos por parte de la Administración que no ha permitido que se llegue a un equilibrio en este tema".
Y aunque la Alcaldía de Cali reclama que los operadores también tienen "asuntos pendientes" por resolver, Sebastián Nieto asegura que los operadores no tienen ninguna multa contractual por incumplimiento.
"Si tenemos incumplimiento entonces dónde están las multas, dónde están los requerimientos de incumplimiento. Estamos cumpliendo con el servicio y con la desintregación. ¡Ah! que el servicio debería ser mejor, de eso no tenemos dudas", recalcó Nieto.
De esta manera, en el caso de Unimetro, después del arbitramiento espera recibir alrededor de 100 mil millones de pesos que es el déficit que tiene la empresa operadora desde que se puso en funcionamiento en 2009.
"El municipio tiene que entender en esta administración, o en la que viene, que el responsable de la movilidad de la ciudad es directamente ella y no los operadores. A nosotros también nos duele lo que pasa con el sistema".
De acuerdo con la Alcaldía, actualmente deberían estar operando en la ciudad un promedio de 830 buses, pero solamente están rodando 765 vehículos.
En el caso de Unimentro, 120 buses, de los 164 que tiene para funcionar, tienen el servicio de recaudo, los cuales entre la reserva y los servicios de operación, solamente salen 90 buses a las calles.
