Los ataques al sistema del Mío siguen preocupando a las autoridades en Cali, ya que en lo que va corrido del 2016 se han presentado 784 casos de vandalismo, número similares a los años más críticos.
Así lo confirmó un informe presentado por Metrocali en donde indicó que los meses con mayores ataques fueron febrero y marzo, en donde se reportaron 179 casos de agresiones contra buses, estaciones o personal del Masivo, el cual se puso en marcha en 2009.
Aunque la cifra aparentaría una posible reducción, al final del año, en comparación con los caoss que se presentaron en 2012, 2.600 (octubre el más crítico con 486 casos); 2013, 2862; 2014, 2785 y 2015, 282, la situación sí preocupa a directivos de la empresa que ven cómo estos ataques afectan la circulación del sistema.
"Estos hechos por supuesto, afectan las frecuencias y por ende la movilidad de los usuarios, porque la ruta empieza a presentar retrasos, deben abordar otro vehículo o simplemente llegar tarde a sus lugares de destino", aseguró Carlos Becerra, jefe de Planeación de Operación de Metrocali.
Y aunque es claro que en muchas ocasiones los buses afectados no salen de circulación inmediatamente, desde la Oficina de Planeación aseguran que esto perjudica, aún más, la calidad del servicio.
Sin embargo, las autoridades ya han identificado los sectores de mayor agresión de usuarios al sistema, en donde son reportados, a diario, por lo menos cinco o seis casos de vandalismo.
Esos sectores son: Cuatro Esquinas, el centro y barrios como Meléndez y Polvorines. Entre quienes sean capturados podrán ser judicializados por vandalismo, daño a servidos público y detrimento patrimonial.
Entre los casos de vandalismo más comunes están: el incidente con arma blanca, peleas o riñas, robo y rotura de ventana a buses o estaciones del Mío.
