Almacenar los alimentos en la nevera es una de las principales razones por la que es tan útil este electrodoméstico. Sin embargo, con el paso del tiempo se ha descubierto que guardar muchas de estas preparaciones en algunos objetos, no es tan saludable.
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Pese a que la cocina es cada vez más eficiente y práctica, muchas personas tienden a guardar ollas y sartenes en la nevera, especialmente luego de una comida. Sin embargo, esta práctica puede acarrear varios inconvenientes que vale la pena considerar por nuestra salud.
Estos son los objetos que no debería guardar en la nevera
¿Por qué no almacenar ollas y sartenes en la nevera?
1. Pérdida de frescura y sabor
Las ollas suelen estar hechas de materiales que no son ideales para el almacenamiento prolongado de alimentos. Almacenar comida en una olla y sartén puede afectar la frescura y el sabor de los alimentos, ya que no están diseñadas para mantener un ambiente hermético como los recipientes de almacenamiento adecuados.
2. Contaminación Cruzada
Al guardar estos objetos en la nevera, existe el riesgo de contaminación cruzada, lo que puede transferirse a otros productos en el refrigerador, comprometiendo la seguridad alimentaria.
3. Cambios de Temperatura
Al sacar una olla o sartén caliente de la cocina y meterla en la nevera, se puede provocar un cambio brusco de temperatura que afecta tanto a la comida como al propio electrodoméstico. Esto puede llevar a un mayor consumo energético y afectar el rendimiento del refrigerador.
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De esta manera puede almacenar los alimentos en la nevera
- Use recipientes herméticos como de vidrio o plástico con tapas herméticas que son ideales para conservar los alimentos.
- Espere que los alimentos se enfríen a temperatura ambiente antes de refrigerarlos.
- Separe los alimentos cocidos de los crudos en la nevera, ya que esto evita que las bacterias de los alimentos crudos, como carnes o vegetales, contaminen los alimentos cocidos, lo que podría causar enfermedades alimentarias.
- Coloque los recipientes en las áreas correctas dentro de la nevera. Los estantes superiores son ideales para productos cocidos o listos para consumir, mientras que los crudos deben ir en las partes inferiores para evitar derrames o contaminación.
Finalmente, guardar ollas y sartenes en la nevera no es la mejor opción. En reemplazo de esto, se puede optar por recipientes adecuados que brinden mayor seguridad.
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